8 – 9 (Elleunle Osá)



Santos que hablan: Changó, Oyá.

Refranes: “Amigo mata a amigo”, “Arbol que nace torcido, jamás su tronco endereza”, “Lo malo que hizo una vez no lo vuelva a hacer”

Nace la anuria renal.

Se creó la luna.

Nació el trono de Ikú.

En este oddun hay que hacer las cosas completas.

Oddun de suplantación y pérdidas.

Elleunle Osá que era el que despertaba a  Orula fue suplantado por Elleunle Oddí.

Marca traición de amigos.

No coja lo que no es suyo.

En este oddun Changó le robó el dinero a Oyá.

Se recibe Pinaldo.

Cuídese de problemas judiciales.

Dele un pato a Olocun y lléveselo al mar.

No coma coco ni dulce de coco.

Reciba a  Ochosi.

Dele de comer carnero a eggun en la tierra.

Ponga bóveda espiritual astral.

Cuidado no se descubra una cosa mala que usted ha hecho.

Atienda mucho la obra espiritual.

Hay que hacerle el trono de Ikú en el patio o en un rincón.

Cuidado en la bebida no le echen un daño y pueda pasarle algo a la persona.

Dele un pollito a Eleguá.

Cuídese el corazón.


Este es un oddun donde se alcanza estabilidad en los negocios y la persona prospera y esto despierta le envidia de sus compañeros de trabajo.

Dele dos gallinas a Oyá.

Hay trampas.

Después que usted se acuesta a dormir no le abra la puerta a nadie aunque sea conocido.

Evite visitar enfermos.

Analice bien las cosas antes de decir que sí.

Dele un pollo a Eleguá.

Pídale a los Astros, al cielo.

Respete las hijas de Ochún.

Cuídese la vista y los testículos.

Si tiene guerra fuerte se le da carnero a Changó y un gallo viejo y se le lleva al pie de una palma.

Sea reflexivo y analítico.

No llegue a creerse prepotente para que no pierda posición en la vida.

No aclare chismes.

Tiene que hacer santo.

Duerma nueve días con las manillas de Oyá.

Cuídese de los vientos malos.

Trabaje la obra espiritual.

No sea curioso.

Prosperará en la vida siempre que atienda a los santos.

Historia de Abbo e Iki que eran grande amigos. Un día Iki se fue a registrar y  le marcaron hacer ebbó, no comer dulce de coco, no abrir la puerta a nadie después que se acostara a dormir y dormir durante nueve días con las pulsas de Oyá puestas. Olofin mandó a buscar a Abbo y le pidió que le trajera la cabeza de Iki y este le dijo que era imposible porque Iki era su mejor amigo. Entonces Olofin le propuso mucho dinero, pero le dijo que si no le traía la cabeza de Iki, pagaría con la suya. Abbo tocó la puerta de Iki y este al principio no quiso abrirle, pero Abbo le dijo que le traía dulce de coco y como era el dulce preferido de Iki y además, era su mejor amigo quien tocaba a la puerta, le abrió entonces a Abbo. Este le dio un golpe fuerte a Iki, lo dejó sin conocimiento y lo metió en una caja. Durante la travesía al castillo de Olofin ocurrió una gran ventolera, cae Abbo, ya Iki había recobrado el conocimiento, sale de la caja pero deja los pulsos. Abbo se levanta aturdido, agarra la caja y ve que no pesaba, pero al escuchar el sonido de las nueve pulsas aseguró que dentro seguía Iki. Al llegar al castillo y los súbditos de Olofin destapar la caja y no ver a Iki, se dio a la fuga Abbo a lo que Olofin ordenó Suyere: Filolo filolo bale... (Agárrenlo que se va). Entonces le cortan la cabeza a Abbo en señal de cumplir con lo prometido a Olofin. Abbo quedó con los ojos abiertos como seña de traidor y es por eso que cuando se mata al carnero, este queda con los ojos abiertos.